El Moncayo posee una impresionante riqueza vegetal, destacando hayedos, robledales, pinares, sabinas, coscojares, encinares, choperas y diversos matorrales montañosos. En menor medida, y en zonas con mucha humedad se encuentran álamos, fresnos y abedules.
La caza ha sido practicada en el Moncayo desde hace miles de años debido a su riqueza faunística, en la que destacan jabalíes, conejos, corzos, ciervos y zorros. También se pueden encontrar varias especies de aves, entre ellas perdices, arrendajos, azores, águilas reales y buitres. Se recomienda la visita al Centro de Interpretación de Agramonte o Añon para conocer más a fondo estos datos.